El pasado 11 de julio, volví a hacer el monólogo en un chiringuito de playa. Al final parece que me voy a hacer experto en monólogos en chiringuitos de playa.

El pasado 11 de julio, volví a hacer el monólogo en un chiringuito de playa. Al final parece que me voy a hacer experto en monólogos en chiringuitos de playa.

Hay que decir que a veces haces monólogos en un chiringuito de playa y no está nada preparado, lo tienes que hacer simplemente en medio de la nada con lo que te cuesta captar la atención del público. Pero por suerte el chiringuito de San Salvador, que se encuentra en la localidad de El Vendrell, en Tarragona, tenía su mini escenario y su foco. 

En un principio parecía que no se llenaría, pero al final estuvo muy bien de gente. Para no estarlo, podían cenar allí de barbacoa con cerveza incluida por sólo 5 €.

Público muy variado, pero muy receptivo desde el primer momento, digamos que no me lo tuve que currar nada para captar su atención. En ambas partes del monólogo, se cogieron en seguida. Ya que lo hice en dos partes haciendo un pequeño descanso entre una y otra parte del monólogo.

La verdad es que es una muy buena idea hacer monólogo en un chiringuito de playa. La gente disfruta mucho viéndolo, ya sea en sillas de plástico, en hamacas o en simplemente sentados en la arena. Cualquier sitio es bueno para relajarse una noche de verano y disfrutar de un monólogo a la fresca.